Con los meses de verano acercándose y algunos de los mejores precios de la gasolina en años, el viaje familiar anual es casi inevitable. Afortunadamente, el Departamento de Transporte (DOT) también es consciente de ello y está aplicando leyes que garantizarán que usted y su familia lleguen sanos y salvos a casa de la abuela. Para ello, vigilan tanto a los "grandes camiones" que circulan por las carreteras como a las empresas que los gestionan. El DOT hace cumplir una serie de normas llamadas "Horas de Servicio". Son requisitos que, si se cumplen, hacen que la carretera sea más segura para todos. Incluyen cuánto tiempo puede conducir un conductor, trabajar en un día y cuánto debe descansar. A continuación se presenta un esquema sencillo de las normas:
- Los conductores no pueden conducir más de 11 horas después de 10 horas consecutivas de descanso.
- El conductor puede trabajar (estar de servicio) un total de 14 horas, pero después debe hacer una pausa de 10 horas consecutivas.
- Un conductor no puede conducir después de 60 a 70 horas de servicio en 7 a 8 días consecutivos. (Un conductor debe tener un descanso (reinicio) de 34 horas consecutivas después de la semana laboral de 7 a 8 días consecutivos).
Hay algunas excepciones, pero por regla general esto es lo que la mayoría de los transportistas por carretera (OTR) cumplen.
Estas normas se hacen cumplir de varias maneras; la más común es la del Departamento de Transporte, que establece puntos de control aleatorios, así como las básculas estándar que se encuentran en puntos fijos a lo largo de las carreteras. La era digital también está llegando al sector y ahora permite a los transportistas autocontrolarse y regularse. Cada vez más camiones están equipados con un Registrador Electrónico a Bordo (EOBR). Esto permite a un transportista ver lo que el conductor está haciendo en lo que respecta a la velocidad, el tiempo en un lugar, en servicio y fuera de servicio el tiempo, etc. Estos datos también ayudan al transportista a sancionar a los conductores que no respetan las normas y a reducir las tarifas del seguro cuando los conductores se comportan correctamente.
En 2010, se produjeron 1,1 accidentes mortales por cada 100 millones de kilómetros recorridos por camiones, frente a los 2,4 por cada 100 millones de kilómetros recorridos en 2000, según el Departamento de Transporte, y se está trabajando para reducir aún más esta cifra.
Es por el bien común que estas leyes se aplican, pero tienen un impacto en el cargador y los transportistas. En el caso de los transportistas, deben tener en cuenta los tiempos de tránsito en sus programas de producción y presupuestos. En cuanto al transportista, normalmente necesita más equipos y conductores para cubrir la misma distancia y volumen de carga que podía cubrir con menos esfuerzo antes de estas nuevas normas. Las leyes se crean para que las carreteras sean más seguras para todos, incluidos el público en general, los conductores y los propios transportistas. Espero que esto refuerce su nivel de comodidad mientras viaja por las autopistas y carreteras de este país este verano y en el futuro.
Que pases un buen verano.
Rob Haynie, Director de ventas de Carrier